El Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (MESCyT) concedió fondos, por segunda ocasión, para el Observatorio Sismológico del Politécnico Loyola (OSPL) del Instituto de Estudios Especializados Superiores Loyola (IEESL), a través de su programa de financiamiento de proyectos de investigación en Ciencias y Tecnología (FONDOCYT), Convocatoria 2018-2019, con el objetivo de ampliar la red al noroeste de la nación.
El proyecto es denominado "Caracterización de las estructuras geológicas sísmicamente activas del noroeste de la República Dominicana" y durará 2 años y seis meses, donde pretende instalar 8 nuevos sismógrafos en esa región.
La Imagen muestra el área de estudio junto a los lugares preliminarmente escogidos para la instalación de sismógrafos y así monitorear las Fallas: Septentrional, Norte de La Española (Límite de Placas NA-CA), Camú y Rio Grande, entre otras.
Resumen
El Observatorio Sismológico del Politécnico Loyola (OSPL) ha registrado desde sus inicios, a finales del 2012, unos siete mil eventos sísmicos en la Isla de La Española y sus alrededores. Hasta el presente, el OSPL se ha enfocado en la actividad sísmica del suroeste de la isla, donde caracterizó diferentes fallas geológicas con cierta peligrosidad para esa región, esto, gracias al primer proyecto presentado en 2014 y financiado por el Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Superior (FONDOCYT) en un tiempo de 2.5 años.
Actualmente, el país carece de la instrumentación necesaria en el noroeste para caracterizar dos de las estructuras geológicas más peligrosas de esa región: La Falla Septentrional (SFZ) y la Falla Norte de La Española (NHFS), ambas presuntas responsables de los terremotos del 1562 y 1842 que destruyeron Santiago y La Vega, así como Cabo Haitiano, Port de Paix y Santiago, respectivamente.
Mediante la instalación de 8 sismógrafos de “Período Corto” en una zona comprendida entre Monte Cristi y Santiago, se pretende lograr mecanismos focales convincentes para determinar el comportamiento de estas dos grandes estructuras peligrosas, así como también evaluar el comportamiento de otras fallas aparentemente peligrosas en la región, como lo son la Falla Camú y la Falla Río Grande, que cruzan diagonalmente la Cordillera Septentrional.
Según la data obtenida por OSPL en los años recientes, la Falla Septentrional experimenta un gran descenso en su actividad sísmica, esto es, como resultado de un cambio de dirección de esfuerzos tectónicos recientes o la acumulación de energía sin liberar en el pasado reciente.