Con el objetivo de contribuir con nuestra casa común, el planeta Tierra; estudiantes, profesores y directivos del Instituto Politécnico Loyola (IPL), en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, participaron el pasado sábado 15 de junio en la siembra de aproximadamente dos mil árboles de cedro en el sector La Siembra, paraje Los Mineros, perteneciente al municipio de Los Cacaos, en San Cristóbal.
Tras la realización de la primera plantación de esta campaña de reforestación, el rector de la institución jesuita, padre José Rafael Núñez Mármol, S.J, expresó que la siembra de árboles permitirá proteger nuestras fuentes acuíferas, respirar mejor oxígeno y crear bosques sostenibles que se conviertan en importantes fuentes de ingresos, tal como ocurre en otros países de América Latina.
De su lado, la supervisora de brigada y educadora ambiental del Ministerio, Xiomara Sánchez, quien también participó en la jornada, explicó que el trabajo consiste en reforestar la parte alta donde nacen los ríos que suplen de agua a San Cristóbal, Baní y el Gran Santo Domingo.
La cuenca del río del Nizao, Los Mineros, Santana, Calderón, el Guineo y el entorno de las presas Higuey-Aguacate, son parte del radio de acción que abarcan las brigadas del organismo gubernamental en la zona.
Previo a esta jornada de reforestación, decenas de estudiantes del Instituto Politécnico Loyola participaron en la charla “Importancia del árbol para el medioambiente”, la cual fue impartida por la educadora ambiental Silvia Mateo.
¿Por qué se reforesta la zona?
Hace unos años el área, con una extensión de doce tareas, sufrió los embates de una plaga que afectó las plantaciones de guama que cubrían todo el terreno. En ese sentido, Moreno Tejeda, propietario de las tierras, firmó un acuerdo con el organismo oficial para proceder a la reforestación.
Por su extensión, el terreno se dividió en tres secciones. Una de ellas, ubicada en la parte más alta, quedó bajo la responsabilidad del IPL, las dos primeras ya habían sido reforestadas, según indicó el supervisor del programa “Quisqueya Verde”, Roberto Garabito.
El árbol escogido es el cedro, endémico de la República Dominicana y muy apreciado por la calidad de su madera.
Para el proceso de reforestación existe un protocolo: si las pequeñas plantas están colocadas en fundas plásticas, son retiradas de estas y luego se hacen los hoyos donde se siembran de manera vertical; ya introducidas, se cubren con tierra de modo que no reciban aire del exterior porque de lo contrario no crecerían. Una vez reforestada la zona elegida, las brigadas de Medio Ambiente dan seguimiento a la siembra realizada, limpiando el terreno de la maleza en tiempos de lluvia o regándolas cuando hay sequía.
Roberto Garabito aseguró que, en once años, a partir del 17 de octubre de 2008, se han sembrado unos doce millones de árboles en el municipio de Los Cacaos, entre la variedad Pinus caribea, Pinus occidentalis, Grevillea, Caoba, Cedro y Penda, esta última usada como alimento para los animales.
Durante la reforestación, los estudiantes Yan Alcántara y Moisés Darío Reyes coincidieron en señalar que el involucramiento de los ciudadanos en la siembra de árboles en zonas que necesitan ser protegidas, constituye una actividad de responsabilidad social que nos ayuda como país a preservar agua y bosques para las futuras generaciones.
En tanto que, la profesora Madelin Quezada, del departamento de Ciencias del IPL, señaló que el cuidado de nuestra masa boscosa permite que, junto con la protección de nuestras fuentes hídricas, podamos tener mejor oxígeno e hidrógeno.
En la actividad estuvieron presentes Loida Doñé, Elizabeth Sosa y Riken Lara; directora de Proyección Institucional, subdirectora del Nivel Secundario y gerente de Comunicación y Mercadeo, respectivamente, todos pertenecientes al centro educativo sancristobalense.